domingo, 28 de abril de 2013

the other side of the coin


Hello everybody!


Aun me acuerdo de aquel día, en una clase de 5º de carrera, cuando un profesor hablaba de lo importante que era hacer el TFC porque “fuera” lo valoraban mucho. Recuerdo mi risa interior: “Yo? Trabajar en el extranjero?? No way! Jamás de los jamases, con lo bien que se está aquí...”

Recuerdo todo el año siguiente a esa clase. Estudiando las asignaturas pendientes (que no eran pocas), sacándome el carnet de conducir, yendo a clases de inglés para preparar el FCE, trabajando en dos sitios distintos pero que nada tenían que ver con lo que yo quería, Química.

La gente iba y venía. La gente buscaba trabajo y no lo encontraba. Lo mejores conseguían, los no tanto no. Creo que era la única que no tenía trabajo en lo mío. La frustración se apoderaba de mí cual enredadera...

Mi transición a la vida adulta no terminaba de cuajar, no lograba ascender. Quizá tenía que plantearme ese gran miedo, el extranjero, ese gran desconocido para mí. Pero estaba preparada?
Cómo saberlo?

Hace ya 14 meses que me armé de valor y fui a informarme. Una amiga se fue un verano a UK a hacer prácticas y me hizo ver que podría ser una buena opción. Y me tiré a la piscina. De plancha. Sin saber si había agua dentro.

Cuántos miedos, cuántas dudas, cuántos “y si....”, “pero...”, “es que...”. Dejarlo todo atrás, sin saber que me encontraría, sin saber absolutamente nada. Los que ya lo habían hecho te animaban. Los que no, te decían que iba a ser una experiencia. Pero mi novio, mis amigas, mi familia, todo eso iba a quedar atrás, en stand-by....

El día llegó y me fui para 3 meses. Qué sorpresa, pero fue la mejor experiencia de mi vida. Aprendí un montón, me lo pasé muy bien y conocí a gente maravillosa. Tanto me gustó que quise volver, para una larga temporada, un año y quizá más? No lo puedo saber a ciencia cierta.

Y ahora que ya han pasado 2 meses (sin contar los 3 que ya estuve), creo que es hora de aclarar algunas cosas que veo que quizá se le escapa a la gente, a los que me leen, a los que no, a los que me ven cada día, los que me ven a veces, con los que hablo mucho, o poco, o nada, a todos...

Esto es absolutamente genial. Claro que sí. Estoy contenta. Pero la moneda tiene dos caras.

Porque cada día me levanto. Me levanto en una cama vacía, en una habitación vacía. Nadie me dice buenos días. Desayuno en una cocina, sola. Nadie se despide de mí ni me desea un feliz día. Nadie me da un abrazo o un beso. Llego al trabajo y ahí me paso la mayor parte del día. Que la gente del trabajo es estupenda, no digo que no, pero siempre tendré la sensación de no encajar, de que no es mi sitio.
Cada día vuelvo a casa. Ahora voy al gimnasio y eso me ayuda a canalizar la tristeza y la soledad. Porque si, cada día me siento triste y sola, pero no puedo ir por la vida con esa actitud, no? Debo ser fuerte y afrontarlo con positivismo. Porque esto es una gran experiencia, porque tengo mucha suerte, claro que sí, no estoy diciendo lo contrario y tampoco estoy escribiendo esto para quejarme.
Y cada noche me voy a dormir, sola. En una cama, vacía. En mi habitación, que está vacía. Sin más contacto de cariño que el que me puedan dar por skype o whatsup...
No es una queja, es la realidad que co-existe con toda la felicidad que siento por el hecho de estar aquí.

También el darme cuenta de quién te echa de menos de verdad y quién no... Ver quién ya te ha dejado atrás en sus vidas y quién te sigue teniendo presente aun estando tan lejos. Y solo han pasado dos meses. Qué me encontraré dentro de un año? Voy a quedarme sola? Sé que no pero...el miedo está ahí.
Y yo echo de menos a la gente un mundo. Y echo de menos los abrazos, los besos, las muestras de cariño. Este es un país frío, con gente fría.

Qué melancolía! Ya está, solo necesitaba desahogarme un poco. Por mucho que sea feliz, esto es lo que hay. Así es como se siente la otra mitad.


Vayamos con el resumen de la semana :)

Esta semana empezó con muy buen tiempo. De hecho el Martes las chicas del trabajo me enseñaron el camino que hacen por las mañanas con las bicis, un camino que va por al lado del canal de Exeter, que es precioso en un día soleado, todo lleno de verde y con la ciudad de fondo. Nos tomamos una cerveza al sol después del camino, y contentillas nos fuimos Bea y yo al gym.









En el trabajo he estado haciendo mis muestras repetidas durante 3 días en dos máquinas para poder luego demostrar que sé usarlas, etc etc (lo mismo que hice en diciembe para las otras dos máquinas que estaba usando). Esta semana ha sido dura porque entraba a las 8h pero luego tenía más tiempo por la tarde al salir a las 16h, lo que se ha agradecido porque las tiendas aun estaban abiertas, inaudito xD

En el gym todo muy bien, subiendo poco a poco de nivel. Aun sin resultados visibles.

El miércoles hice lentejas!! Ya puedo oir a mi madre decir "y luego te las hago yo y te las comes a regañadientes!" jajaja ver para creer, lo sé!!

todo a la olla

chup chup!

Resultado!


El Viernes fuimos a cenar a casa de Inma y Ana, y Katrin nos preparó pasta a la carbonara de la buena, como se hace en Italia y buf! Delicioso! Qué bien cenamos! Luego nos fuimos a tomar algo al Coal, que es el bar dónde estuvo trabajando Mar antes de que pasara todo lo que pasó, y me recordó mucho a ella. Me pedí un mojito, que lo echaba de menos y sé que allí los hacen muy ricos.
Luego al Mosaic, como ya viene siendo costumbre, con Bea y Katrin. Gran noche.








Y el sábado... No tenía resaca pero tenía un sueño anormal y luego me dí cuenta que también fiebre. No salí de la cama, literalmente. Dormí y dormí. Por la noche la fiebre había bajado pero ya tocaba irse a dormir. Otra vez.


Hoy me he levantado mejor pero con mareos. He ido a hacer la compra y me he vuelto enseguida.
Lavadoras, aspiradora, cocina, orden, estudio,....un domingo como otro cualquiera sin nada a destacar.


Y si, es en días como este cuando me vienen los bajones y salen entradas como esta. Sorry.


Feliz nueva semana!

XOXO,

*M*

No hay comentarios:

Publicar un comentario